Los dominios son nombres que se utilizan en la web para tener presencia en internet, estos son de gran valor pues ayudan a que las marcas sean reconocidas.
Sin embargo, los nombres de dominio son un servicio y como todo contrato, expiran, lo cual puede ocasionar la pérdida permanente de los mismos.
Revisemos entonces que es un dominio expirado y cómo hacer para que estos no afecten a nuestra empresa.
Para comprender qué es un dominio expirado, primero debemos conocer cuál es el ciclo del dominio. A continuación veremos las etapas.
Las empresas que se encargan de proveer de dominios se llaman registradoras, y los usuarios que adquieren los dominios se conocen como registrantes.
Cuando un registrante registra su nombre de dominio con un registrador significa que ahora podrá hacer uso exclusivo de dicha etiqueta.
Como mencionamos anteriormente los dominios son servicios por lo que se cobrará un cargo por su utilización y el proveedor definirá un plazo de validez en el que el registrante podrá hacer uso del nombre, este periodo dura por lo menos un año.
La ICANN (Internet Corporation for Assigned Names and Numbers) rige el sistema de nombres de dominio (DNS), más específicamente de los dominios de alto nivel, TLD.
Y las empresas registradoras autorizadas adquieren los dominios de allí para ofrecerlos a sus clientes.
Cuando haya terminado el plazo establecido de propiedad, el registrante debe renovar su dominio en el periodo indicado.
Los usuarios que renuevan sus dominios, extienden su derecho de uso y pueden seguir sacándoles provecho.
Renovar es muy importante pues previene que los dominios se desactiven y se pongan disponibles en el mercado para otros usuarios.
Una vez renovado tu dominio, la fecha de caducidad se actualizará.
Normalmente cuando un dominio expira es a causa del descuido, falta de pago o decisión del propietario.
Si no se realiza la renovación correspondiente, el contrato caduca y el dominio expirado queda libre de manera automática, a simple vista no parece algo realmente problemático, sin embargo esto puede ser más peligroso de lo que se podría creer.
Un dominio expirado, dentro de la comunidad cibernética, es considerado un incidente de alto riesgo que debe ser atendido y corregido cuanto antes.
Un dominio web es de suma importancia para las marcas, pues como mencionamos anteriormente es el nombre por el que se dan a conocer en el espacio digital. Una vez que la gente los reconoce por él, pueden tener una mejor interacción con su clientela y mantenerse competitivos en el mercado.
Los dominios, por lo tanto, tienen un amplio valor, por lo que si una empresa bien posicionada deja que su dominio expire, prácticamente está tirando a la basura todo su trabajo y además está poniendo en bandeja de plata un recurso que generará capital a alguien más.
Ya sea que se te haya pasado la fecha de expiración o que estés por tomar la decisión de dejar caducar a tu dominio, debes tomar en cuenta estas consideraciones.
Si un nombre de dominio expirado es registrado por otro registrante es probable que tenga objetivos diferentes. El nuevo registrante puede usarlo para su propio negocio o, en un peor escenario, buscar dañar a la marca que lo poseía anteriormente.
Una vez que el nombre de dominio ha expirado, el registrante que lo ha dejado caducar no tiene acceso ni derecho alguno sobre él, por lo que los perjuicios que le ocasione no pueden ser corregidos, ni mucho menos reclamados al actual registrante.
Un nuevo registrante puede dañar la reputación de la compañía registrante anterior de maneras inimaginables. Ilustrémoslo con un ejemplo ficticio:
Una empresa de carreolas para bebés llamada Ciudad Bebé adquiere el dominio ciudadbebe.com con el registrador Buicks.
Durante los cinco años de su contrato, el sitio web crece mucho y los clientes conocen muy bien a la marca y su dominio pues a través de él pueden realizar compras online.
Sin embargo, tras una muy buena oferta, Ciudad Bebé se vuelve parte de la empresa Mundo Bebé, quien tiene su propio dominio y decide que no necesita del de Ciudad Bebé pues le dará un espacio en su sitio para minimizar costos.
Al término del contrato, Buicks manda un correo electrónico para avisar que es momento de renovar su dominio ciudadbebe.com pero Mundo Bebé decide ignorarlo y dejarlo expirar.
Poco después ciudadbebé.com es adquirido por una agencia de contenido para adultos y como el sitio sigue siendo frecuentado por los clientes de Ciudad Bebé, esto causa gran indignación entre ellos por lo que deciden acusar a la marca en redes sociales y no comprarle más.
Como pudiste ver en el caso anterior no solo se dañó la reputación de la organización sino que también fueron afectados sus clientes y por lo tanto el incidente también ocasionó bajas en las ventas. Este es un caso común de dominio expirado.
Los nombres de dominio son un activo con gran valor monetario, algunos están valuados hasta por millones de dólares, cuida bien el tuyo
Los dominios son temporales, hay registradores que ofrecen contratos más largos con los que puedes conservar el dominio por más tiempo pero finalmente expiran.
La mayoría de los proveedores de dominios brindan a sus clientes una notificación cuando es tiempo de renovar pero cabe recalcar que no están obligados a hacerlo.
El dominio expira cuando el registrante no lo renueva o no lo renueva a tiempo, y esto también puede suceder si el registrador no se puede poner en contacto con el usuario.
Por lo que es importante que desde el principio el registrante brinde su información correcta y completa, así podrá recibir notificaciones acerca del estado de su contrato, el periodo de validez y por supuesto avisos sobre la expiración de su dominio.
Realmente es complicado que un dominio expire, pero si por error dejaste pasar la fecha o tu proveedor no se comprometió con la notificación y no te enteraste de la expiración, hay algunas cosas que aún puedes hacer.
El periodo de gracia es un beneficio que muchos de los registradores conceden a sus registrantes y consiste en una ampliación del plazo para conservar el dominio.
Es decir, una vez que el dominio ha vencido, el registrador da una tolerancia extra para renovarlo, normalmente otorgan 30 días pero incluso llegan a extenderse a 45 días.
Una vez pasado el periodo de gracia, el registrador retiene el dominio para ofertarlo entre sus clientes, esta redención dura aproximadamente 30 días.
Si deseas recuperar tu dominio, puedes entrar a la subasta y comprarlo nuevamente antes de que alguien más lo gane.
En otro escenario, si el registrador pone a disposición el dominio y nadie lo reclama u oferta por él en un mes, se procede a su eliminación.
Cuando un dominio está en la etapa de Pending Delete (Pendiente a Eliminación) ya no hay manera de renovarlo. Es posible acudir a una empresa de Backorder pero no es lo más recomendable.
Una empresa de backorder ofrece el servicio de recuperar tu dominio. Estas tienen convenios con diferentes registradoras y pueden lograr obtener el dominio perdido inmediatamente después de que sea liberado, pero la realidad es que no ofrecen ninguna garantía de ello.
Supongamos que después de todo tu dominio caducó, se eliminó, se puso de nuevo en el mercado y fue adquirido por otro registrante. La única y última alternativa que queda es negociar con el actual dueño para comprarle el dominio.
Puede que tengas que adquirirlo de un nuevo proveedor o directamente del nuevo propietario. Pero esperamos que no tengas que llegar a este punto por eso a continuación te brindamos algunos consejos para la prevención de un dominio expirado.
Como revisamos con anterioridad, es de suma importancia brindar los datos del registrante del dominio con minuciosidad pero también resulta imprescindible actualizarlos constantemente.
Cuando un registrante actualiza sus datos disminuye la posibilidad de un dominio expirado pues su registrador puede mantener contacto con él.
Procura no asignar un único responsable del nombre de dominio. Tu registrador debe tener contacto con por lo menos tres personas: el registrante, un administrador y un técnico.
Cada uno de ellos debe contar con tareas asignadas que les ayuden a definir quién será el encargado de renovar el dominio.
Para seleccionar a tu proveedor, primero debes definir tus necesidades y posteriormente revisar las opciones que se adapten a ellas.
Pero de manera general nuestras recomendaciones para tu elección de registradora son las siguientes:
Comúnmente los registradores te ofrecerán múltiples beneficios y te incluirán la notificación de la renovación porque al ser su servicio, no les conviene que dejes de contratar, pero aún así pon atención en quien te ofrezca más ventajas.
Un dominio, como ya mencionamos, llega a tener mucho valor y es significativo que sepas el del tuyo, no solo monetariamente sino a nivel reputacional.
Evalúa qué tan perjudicial sería perderlo.
Los dominios deben renovarse oportunamente, ahora que conoces todas las implicaciones negativas que puede significa su expiración, seguramente estarás más precavido.
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