Internet es una herramienta esencial para las empresas que brinda oportunidades de crecimiento y expansión, siempre y cuando se usen sistemas de ciberseguridad la navegación estará protegida.
A través de plataformas en línea, las organizaciones pueden alcanzar mercados globales, optimizar sus operaciones y mejorar la comunicación con clientes y proveedores.
Sin embargo, internet es también un entorno propenso a las amenazas cibernéticas y el robo de información se ha convertido en una preocupación crítica para las empresas.
La presente nota te comparte cómo prevenir el peligro que corren los datos, continúa leyendo.
Para entender qué es el robo de información, sería prudente definir en un inicio lo que entendemos por información.
La información es un bien que tiene un valor para los individuos y las empresas y que por lo tanto resulta atractivo para los ciberdelincuentes, quienes buscan apropiársela y darle un uso indebido.
En internet, la información es susceptible a la alteración, eliminación o replicación.
El robo de información es, entonces, la obtención y transferencia (sin autorización) de los datos de la víctima, que tiene por objetivo cometer un delito o un fraude y por supuesto es un gran peligro para la privacidad y operaciones empresariales.
Internet es un medio que hoy en día se ha tomado como una herramienta esencial para la gestión de información, sin embargo representa un alto riesgo al exponerla digitalmente.
Los datos se encuentran en peligro pues el ciberespacio cuenta con brechas que pueden ser aprovechadas por los delincuentes cibernéticos, quienes buscan obtener información privada y hacer mal uso de ella.
Sus objetivos son dañar la imagen pública y reputación de las empresas; en el aspecto económico dañar el historial crediticio, afectar el patrimonio, realizar operaciones inmobiliarias o contratar servicios a nombre de su víctima; y perjudicar el acceso inmediato a la información.
Los atacantes pueden incluso suplantar la identidad de las empresas, acceder a los contactos y hacerse pasar como legítimos para hacer que se revele información valiosa.
Sufrir este tipo de incidentes, puede traer a la empresa la pérdida de confianza de sus inversores y clientes, por lo cual es importante prevenir el robo de información en internet.
A continuación conocerás algunas técnicas que se utilizan para el robo de información, lo cuál te ayudará a saber cómo prevenir su peligro.
La ingeniería social es una técnica de robo de información que se rige por la manipulación de personas a través de sus vulnerabilidades.
Por ejemplo si un empleado no cuenta con conocimientos en ciberseguridad, será más sencillo de manipular para que cometa cierta acción que permita al atacante obtener acceso a la información.
Esta técnica se centra en explotar la confianza humana en lugar de vulnerabilidades técnicas. A menudo, los sistemas de seguridad más sofisticados pueden ser eludidos si el usuario final no está alerta y no sigue las mejores prácticas de seguridad.
Por ello resulta importante que los empleados estén capacitados para lidiar con este tipo de técnica, sabiendo reconocer los intentos de manipulación y teniendo conciencia de las buenas prácticas en ciberseguridad.
Ahora bien, de esta técnica se desprenden dos subcategorías relevantes en el robo de información: phishing y smishing, vamos a revisarlas.
Este tipo de estafa en línea tiene la finalidad de robar información confidencial, como contraseñas.
La palabra viene de pescar en inglés (fishing) y se refiere a atrapar a los usuarios para obtener sus datos por medio de fraude.
El atacante simula ser una empresa legítima y solicita información, induciendo a los destinatarios a responder a través de sitios web maliciosos.
Esta técnica utiliza correos electrónicos que incluyen enlaces para dirigir hacia páginas web que imitan a las de organizaciones conocidas. Cuando las víctimas ingresan su información en estos sitios falsos, los atacantes pueden capturarla y utilizarla para cometer fraudes o robos.
Para evitar ser víctimas de phishing, es necesario saber cómo verificar la autenticidad de los correos y por supuesto no hacer clic en enlaces o adjuntos sospechosos.
Esta vertiente tiene como objetivo extraer el dinero de las cuentas bancarias de las víctimas.
Por medio de mensajes de texto se alerta sobre una operación dudosa para que el usuario la reconozca, cuando este responde los delincuentes cibernéticos se contactan por teléfono aparentando ser el banco y recolectan datos de la cuenta.
Los atacantes se aprovechan de la confianza de las personas en las comunicaciones oficiales y una vez que obtienen la información bancaria, acceden a las cuentas de la víctima y realizan transacciones fraudulentas.
La información financiera es muy sensible por lo que se recomienda no compartirla si se sospecha de la veracidad de las comunicaciones, y contactar directamente al banco para verificar la información.
Pharming es un técnica utilizada para robar información personal a través de la redirección hacia páginas web falsas.
Manipula el sistema de resolución de nombres de dominio (DNS) para dirigir a las víctimas a sitios fraudulentos sin que se den cuenta.
Una vez enrutadas al sitio falso, el delincuente podrá atacar el equipo de las víctimas instalando un malware para controlarlo, recolectar información y juntar a las víctimas en una “granja” de datos donde puede explotarse la información de diferentes maneras.
Es necesario configurar al navegador para que pueda advertir sobre los sitios web no seguros, así como verificar la URL del sitio antes de compartirle información confidencial.
Las ventanas emergentes o pop-ups son un tipo de publicidad que aparece en la pantalla del usuario durante su navegación por internet, y ocasionalmente pueden ser maliciosos y estar orientados al robo de información.
En este último caso, los atacantes utilizan pop-ups engañosos que simulan ser alertas de seguridad, actualizaciones de software o mensajes de advertencia para solicitar a las víctimas información sensible bajo la falsa declaración de que es necesaria para resolver un problema.
Es buena idea entonces instalar un bloqueador de pop-ups en el navegador y así mismo evitar dar clics en ellos si llegan a abrirse.
Aunque el Spam en sí mismo es un mensaje no solicitado, enviado masivamente a muchos destinatarios, también suele ser peligroso pues en ocasiones contiene engaños para direccionar a los usuarios a páginas web o para que descarguen contenido que desembocará en invasión a los sistemas para el robo de información o fraude.
Lo mejor es no abrir correos de remitentes desconocidos y utilizar filtros de spam en la bandeja de entrada para reducir la cantidad de mensajes no deseados y por supuesto disminuir la vulnerabilidad.
Man in the Middle (MitM) o ataque intermediario se trata de la intercepción de los datos durante su transferencia entre dos partes.
Los atacantes pueden aprovechar redes inseguras, como Wi-Fi públicas, y robar información sin que las víctimas lo sepan.
Más adelante, en las recomendaciones para prevenir el robo de información, aprenderás que para proteger tu información durante las comunicaciones, lo mejor es utilizar una red privada y cifrar los datos.
En esta técnica, el atacante prueba con diferentes combinaciones de correo y contraseñas para adivinar las cuentas
El llenado de credenciales se basa en la técnica de fuerza bruta aunque también pueden usarse credenciales filtradas, aquellas donde se han expuesto datos de usuarios durante brechas de seguridad anteriores.
Una vez que el atacante obtiene acceso puede proceder al robo de información y suplantar la identidad o clonar sitios para engañar a los contactos de la víctima, amplificando de esta forma el daño.
Para prevenir este tipo de ataque lo mejor es implementar contraseñas robustas y usar autenticador múltiple, para conocer mejor de qué se tratan estos métodos, continúa leyendo el siguiente apartado.
Debe tomarse precaución sobre la información que es solicitada por internet ya que estos requerimientos pueden estar malintencionados.
Por ello es importante verificar la identidad del solicitante para descartar que se trate de un fraude.
Nunca debe compartirse información personal o ingresar contraseñas en sitios no seguros, correos o hacia contactos de dudosa procedencia.
Además, es recomendable utilizar herramientas de verificación de identidad y autenticidad, como buscar reseñas de la entidad solicitante o contactar directamente a la empresa a través de canales oficiales.
Nuestra bandeja de entrada es una puerta de entrada muy sencilla para algunos ciberatacantes, por ello es necesario que cuando llegue un correo electrónico revisemos diferentes aspectos.
Inicialmente es necesario inspeccionar el correo remitente, si es desconocido es preferible ni siquiera abrir el mensaje, si parece familiar se recomienda analizar si es la dirección correcta pues hay delincuentes que pueden hacerse pasar por personas o instituciones.
Si el correo sospechoso contiene enlaces o adjuntos, lo mejor es no presionarlos ni descargarlos pues pueden contener virus y propiciar una infección que permita el robo de información.
Es aconsejable prestar atención a la redacción y el tono del mensaje, ya que muchos correos falsos suelen contener errores gramaticales o un lenguaje poco profesional.
También se debe desconfiar de solicitudes urgentes de información personal o financiera. En caso de duda, es recomendable contactar directamente a la persona o institución a través de otros medios para confirmar la autenticidad del mensaje.
Debe evitarse utilizar dispositivos que no sean de confianza, como equipos públicos, en especial si a través de ellos va a accederse a información personal o realizar transacciones, como movimientos bancarios o compras online.
Si se realizan estas acciones, la información puede quedar grabada en el dispositivo y ser robada por alguien malintencionado.
Es necesario usar equipos conocidos y navegar con seguridad ajustada, por lo menos, a nivel medio, además de limpiar el historial al concluir dicha navegación.
Las compras y cualquier movimiento que se haga con las tarjetas por internet, debe realizarse desde sitios seguros y confiables para proteger los datos sensibles. Asegúrate de que la URL comience con "https://" y busca íconos de seguridad, como un candado en la barra de direcciones.
También es importante examinar y llevar un registro de las transacciones financieras. Hacer una revisión regular permitirá detectar actividad ajena como cargos no autorizados.
En caso de que haya movimientos desconocidos, debe informarse a la institución financiera para evitar que el fraude siga sucediendo, considera activar alertas de transacciones en tu cuenta bancaria para recibir notificaciones inmediatas sobre cualquier actividad inusual.
Por último, se sugiere métodos de pago adicionales, como billeteras digitales o servicios de pago en línea, que ofrezcan capas adicionales de seguridad al realizar transacciones.
Las contraseñas son una forma de mantener la información lejos de terceros, pero para que en realidad den seguridad deben ser difíciles de descifrar.
Para esto deben ser mayores a 12 caracteres, no estar relacionadas con datos personales como fecha de nacimiento, número telefónico o nombres de familiares, y mezclar números, símbolos y letras mayúsculas y minúsculas.
Adicionalmente es especialmente importante no reutilizar contraseñas y cambiarlas periódicamente.
Existen métodos complementarios para asegurarlas, como por ejemplo el administrador de contraseñas que genera claves seguras, las almacena y ayuda a autocompletar. Y el MFA (Autenticación Multifactor), que utiliza múltiple verificación para poder iniciar sesión en las cuentas.
Se recomienda realizar una auditoría de contraseñas de forma regular para identificar y eliminar aquellas que sean débiles o comprometidas.
Es fundamental revisar las calificaciones y comentarios de otros usuarios antes de realizar la descarga, así como verificar la cantidad de descargas y la información del desarrollador.
Si una app pide acceso a información o funciones que no son necesarias para su funcionamiento, podría ser una señal de advertencia.
La descarga segura de aplicaciones puede evitar el robo de información en internet. Para esto deben descargarse de tiendas oficiales y de desarrolladores confiables.
Debe considerarse también desinstalar aplicaciones que no se usen con frecuencia, ya que también pueden representar un riesgo de seguridad.
El almacenamiento debe distribuirse inteligentemente, no es recomendable tener guardadas grandes cantidades de datos en un solo lugar, ya que si, por ejemplo el dispositivo donde se tiene es extraviado, todo se perderá.
Es aconsejable utilizar múltiples métodos de almacenamiento, como discos duros externos, unidades USB y servicios de almacenamiento en la nube.
Te recomendamos organizar tus archivos de manera que sea fácil acceder a ellos y mantener un control sobre qué información se almacena, eliminar datos innecesarios o duplicados para liberar espacio y reducir el riesgo de exposición de información sensible.
Para asegurar la información en línea y evitar que esta sea interceptada durante su transmisión, es recomendable encriptarla.
La encriptación convierte los datos en un formato ilegible para cualquier persona que no tenga la clave adecuada para descifrarlos.
Existen varios métodos de encriptación, como el uso de protocolos HTTPS para sitios web, que aseguran que la comunicación entre el navegador y el servidor esté cifrada.
Es importante mantener las claves de encriptación en un lugar seguro y no compartirlas innecesariamente, pues esto puede propiciar un efecto adverso como el robo de información.
Contar con copias de seguridad es un método de prevención en caso de robo de información que permite recuperar datos importantes y minimizar el impacto de la pérdida.
Para tener un respaldo más seguro es mejor conservar varias copias de seguridad y asegurarse de que estas estén cifradas y almacenadas en un lugar alejado de las posibles amenazas.
Realizar respaldos periódicos asegura el acceso a los archivos críticos, incluso si el dispositivo es robado, dañado o si sufre un ataque.
Lo recomendable es establecer un calendario regular para realizar respaldos y probar las copias de seguridad para asegurarse de que se puedan restaurar correctamente en caso de necesidad.
Este proceso también puede automatizarse.
Actualizar las aplicaciones, el sistema operativo, los navegadores e incluso los sistemas de seguridad brinda mayor protección a la información y brinda mejoras continuas a los recursos, pues implementa en ellos parches que eliminan vulnerabilidades y evitan códigos maliciosos.
Las actualizaciones suelen incluir mejoras en el rendimiento y la funcionalidad, lo que ayuda a mantener tus dispositivos y datos a salvo.
Al realizar actualizaciones, debe verificarse que se descarguen de fuentes oficiales y confiables para evitar la instalación de software malicioso. Mantener un entorno digital actualizado es una de las mejores prácticas para proteger tu información en internet.
Una de las mejores formas de prevenir el robo de información es que las empresas inviertan en ciberseguridad.
Para evitar las intrusiones en línea, pueden instalarse programas de seguridad como antivirus, firewall y anti malwares.
Los antimalwares ayudan a cuidar la seguridad perimetral y protegen las telecomunicaciones de software malicioso, incluyendo virus, spyware y otros tipos de amenazas.
Mientras tanto los Firewalls son útiles para bloquear accesos no autorizados a la red. Actúan como barreras de seguridad entre una red interna y externa, filtrando el tráfico entrante y saliente según un conjunto de reglas predefinidas.
Finalmente, los antivirus sirven para la detección proactiva de códigos maliciosos por medio de un análisis en tiempo real donde monitorean archivos y procesos en busca de comportamientos sospechosos.
Debe buscarse tener una navegación segura y para esto es útil una VPN (Red Privada Virtual) pues cifra tu conexión a Internet y oculta tu dirección IP. Esto proporciona un nivel adicional de privacidad y seguridad al navegar.
Una VPN crea un túnel seguro entre tu dispositivo y el servidor de la VPN, lo que dificulta que terceros intercepten tus datos o rastreen tu actividad en línea.
Combinar el uso de una VPN con otras medidas de seguridad ayudará a proteger mejor ante el robo de información en internet.
El acceso remoto a las computadoras, a pesar de facilitar el trabajo y la colaboración desde diferentes ubicaciones, es peligroso, pues puede abrir puertas a amenazas de seguridad si no se gestiona adecuadamente.
Permitir que otros accedan a tu computadora de forma remota puede exponer la información a robos, especialmente si las conexiones no están protegidas.
Es crucial utilizar herramientas de acceso remoto que ofrezcan cifrado y autenticación robusta. Además de asegurarse de limitar el acceso solo a usuarios autorizados y de establecer contraseñas fuertes. Es recomendable también habilitar la autenticación para añadir una capa extra de seguridad.
Para prevenir el robo de información, los recursos de la organización deben ser administrados de forma responsable.
Ya que estarán disponibles para un número de personas considerable, las empresas deben realizar acuerdos de confidencialidad de la información en donde tengan por escrito la aceptación, por parte de los empleados, de las condiciones.
Establecer políticas es esencial para indicar a los usuarios cuáles son los límites dentro de los cuales deben desarrollar sus actividades y disminuir el riesgo de una fuga de información.
Las organizaciones deben proporcionar la formación necesaria sobre el manejo de los recursos para que los empleados cuenten con los conocimientos para realizar sus actividades diarias con prácticas ciberseguras que no expongan los datos.
Esta formación debe incluir campañas de prevención y mantenerles al día sobre notas periodísticas de metodologías de ciberataques recientes.
Adicionalmente debe tenerse en claro que no todos los accesos deben estar abiertos, sino que debe clasificarse la información para ligar categorías con niveles y roles para ingresar.
Esta limitación, restringirá la entrada a ciertos usuarios y mitigará las vulnerabilidades.
El robo de información es un peligro que se corre en el ámbito digital pero hoy en día es imposible no estar insertado en internet pues nuestros negocios se quedarían atrás, lo que sí puede realizarse es tomar medidas pertinentes para evitar correr riesgos. Si necesitas asesoría para proteger tus datos, contacta a Servnet.