La ubicación cooperativa, en el contexto de la instalación y mantenimiento de un equipo en un ISP (Proveedor de Servicios de Internet), se refiere a un acuerdo entre el ISP y una entidad externa para compartir y utilizar una ubicación física común para alojar equipos de red y servicios.
En este acuerdo, el ISP puede utilizar las instalaciones de la entidad externa, como un centro de datos, una sala de servidores o un armario de telecomunicaciones, para ubicar sus equipos y servidores.
Esto permite al ISP acceder a un entorno seguro y confiable para alojar su infraestructura de red y ofrecer servicios a sus clientes.
La ubicación cooperativa puede ofrecer ventajas tanto para el ISP como para la entidad externa.
Para el ISP, le permite evitar los costos y las complejidades asociadas con la construcción y el mantenimiento de su propio centro de datos o instalaciones. Además, puede beneficiarse de una mayor conectividad y redundancia en una ubicación compartida.
Por otro lado, la entidad externa puede aprovechar la colaboración con el ISP para obtener ingresos adicionales al proporcionar servicios de alojamiento y mantener sus propias instalaciones más utilizadas.